Apaga la luz
Puede que esta noche nos amemos como el mar ama las olas
o puede que no
que con tanta oscuridad
no nos encontremos.
Enciende la luz
y bésame.
Yo estaré aquí al final de las flores grises
en el último escalón del edificio sin paredes
en el aire que me ve caer
desde
ese edificio
hacia
esas flores...
Esperar es envejecer
es llenar de recuerdos la memoria
es después llenar de olvido
el presente.
El último escalón está lleno de angustia
y esas flores
ya no son grises.
Como plata de un río que se parece a un pájaro
como boca de un pez que recuerda la noche en que marchaste
Como una canción que suena en un coche aparcado frente a un mercado.
La mano del niño es una mano pequeña
El niño es hijo que ha crecido
la mano ahora es grande
Como una hoja que escribe un lápiz
así
te espero
como el que sabe que nada regresa
como el que duerme en cuna
como el que sabe que el río vuela
como un pájaro que se ahoga con la música
y su sonido rápido
como el que duerme y no recuerda.
No quiero recordar
cuando llegues
Ayer te amé como se aman las palabras
en verano
con la puerta cerrada
con la sombra de un niño que espera
poder salir
con la puerta abierta de un niño que sale
...y puede que supiera decirte
puede
que supiera.
Los castillos son arena
La playa
nuevamente se hace roca
y te recuerdo
como el niño que tras salir regresa.
Estar aquí después de tanta muerte
Esperar o esperarte en detalles
Saber que la muñeca lleva la mano y la pulsera
Que la guerra es inconexa
que no te puedo esperar
Que la madre se despide en la silla
sola
y que la cortina tapa a un señor con bigote
Fechas de aniversarios y finales
No sé qué será lo próximo
ni lo anterior
que te quise, que te quiero
y que tú no eres tú
pero poco importa.
Envejecer es la palabra para explicar una huida,
y si no comprendes esto
yo tampoco.
Nada tiene sentido o todo es lo de menos.
Yo también voy a morir
y tampoco importa
El amor
una fracción de tiempo
desde los primeros ajedreces y quijotes
hasta la última mano que sujeta
los recuerdos...
El amor está ahí
en la soledad que después queda.
El tiempo de una vida
acaba en portazo.
Cierran la puerta
con broches dorados
...y ella
que queda.