antiguo pasto

Nadie nos lo dijo
golpea la edad y sangra
con el olor a zumo podrido
reinventando la muerte de las cosas.

Nadie nos lo dijo
lleva la cuchara a la sopa
a la boca, habla
el devenir que se solapa en la chaqueta
en invierno
en el hilo hielo.

Nadie nos lo dijo
y sin embargo lo sabemos, nos morimos.

No pensar

La mano descansa en el cuerpo
mientras algo se lleva la existencia.
La mentira son las cosas,
su equipaje, rastros de la nada,
divinas formas que se construyen
para su derribo final, el chantaje de la materia
derribando historia.

Es posible que no sepa
el devenir, que no presagie
la carne podrida, los huesos relamidos,
el silencio. Todo caduca
y es perecedero, materia que se degrada,
olvido.

Pero por qué la mano descansa,
en un resistir hacia lo inevitable
en el cuerpo que una vez amó,
como si en el amor estuviera la salvación
de esta creación innecesaria.

Yo me doy por vencido
El amor es un engaño, otra mentira.
ya que la única salvación posible
es no pensar, darse cuenta.

Palabras


Esta mano es un río que lleva formas como letras.
Tu voz me recuerda la distancia que me separa de ti.
Hoy te veo
y verte también es otra distancia
menos pasajera. Quizá
hoy me amas
una vez mientras otra
el tiempo nos aparta,
nos hace lejanos, nos desconoce.
El espacio es el límite necesario
para contener toda una palabra completa,
pero yo sé que el átomo es el cuerpo y vengo de tocarlo.

Cuántas veces, no sé si la vida o el qué,
nos ha juntado y separado. Jamás
seré tú y poco importa
las veces que quise un cuerpo completo.
Esta mano es un río extenso que va llevando mi vida,
de un lugar a otro lugar
pero no sé si sabré quererte en la frase,
en el texto que se completa
con otras historias,
páginas vacías a la espera de ti
a tu llegada imposible y necesaria.

Marchas y la vida nos va sumando palabras
en un libro
que todavía no tiene final
ni se ha escrito.

Olvidados 2

Este lugar es la calle sin vida de una ciudad a ciegas,
el muro arqueado de una batalla sin sangre
la sombra de un cuerpo que nunca se atreve
a desnombrar las cosas.

Viajar a otro lugar es como buscar la vida
en un vaso vacío que se rompe,
la historia olvidada de alguien
que sucumbe a su propio devenir.

Amó alguna vez su tiempo y sus personas,
habló de ese lugar como quien habla de su casa
apagó la luz mientras dormía
y se aprendió todos los nombres.

Este lugar sigue siendo una calle sin vida,
sin edificios, sin personas,
un sendero, no más, una línea en el suelo
que sólo sirve para decir
que por allí alguna vez pasó una vida
que hay un principio y una llegada,
que todos somos surco de otras historias
y que la muerte espera escondida
bajo la piel.

1991

Si fuera mi sueño un barco
la cama estaría escrita de mensajes.
Tiraría el ancla al suelo
y como si una vela pudiera iluminar mi rumbo
gritaría tu nombre a los fantasmas.

Doy sábanas de pájaros a mis ojos,
llueve demasiado y el viento
me retrocede. No
llegaré a puerto. No
me iré mañana.

Se me ahoga el sueño en tu memoria,
mientras se hunde este barco, cuervos
hacen de mi
un ciego.